LÁMINA

hoy me tuve que levantar a las seis, y me había acostado sólo dos horas antes. casi toda una agobiante noche volviendo a hacer los cuarenta croquis que torpemente había hecho en el formato erróneo. con todo esto soporté toda una puta mañana en la universidad, esperando a que los profesores dieran la maldita nota para luego irme a freír monos al tibet. no me puede ir tan mal, me autoconvencía estúpidamente. había llegado el momento, los profesores salieron y dijieron que las notas están pegadas en las láminas. mierda. tuve que luchar por la puerta contra el tumulto de sonámbulos compañeros de taller. conchesumadre. mi lámina estaba al otro lado de la sala, por lo que me tuve que dar la vuelta más larga que cualquiera se pudo haber dado, pasar por detrás del pizarrón (las notas estaban también ahí, pero la gentío que estaba agolpado ahi era de marcianas dimensiones) y chocando con cuanto pavo se me atravesaba. si me va mal soy un fracaso y todo esto que he sentido este tiempo es la pura verdad. entonces pá! me paré delante de mi lámina (la adoraba, era preciosa: tan llena de afirmaciones contundentes...)y busqué el papelito amarillo que ya había reconocido en otras láminas. lo busqué lo busqué lo busqué, lo ví y...

[foto: yellowapple, by dvl]